Castel dell’Ovo
Prisión, sede del tesoro y residencia real, donde fallece Alfonso V el Magnánimo el 27 de junio de 1458.
Via Eldorado, 3
80132 - NápolesEl Castel dell'Ovo, elevado sobre un islote rocoso, es el más antiguo de la ciudad de Nápoles. Su nombre ha estado ligado a diversas leyendas de la época romana, aunque la realidad nos lleva a su particular forma de huevo.
En este islote natural se instalaron a finales del siglo V unos monjes, que iniciaron el asentamiento humano en el lugar. En el siglo XII ya hay constancia de una fortaleza ocupando el espacio y, en el siglo XIII, Federico II convierte el castillo en sede del tesoro, palacio real y prisión.
Carlos I de Anjou traslada al Castel Nuovo la corte, pero mantiene el resto de funciones. En la prisión es encerrado Conradino de Hohenstaufen, antes de ser decapitado en la Piazza del Mercato el 29 de octubre de 1268.
La conquista de Nápoles por Alfonso V el Magnánimo produce nuevas remodelaciones, enriqueciendo el palacio real, restaurando el muelle, potenciando las estructuras defensivas y bajando las torres.
Durante el reinado de los virreyes españoles y con los Borbones, el castillo fue fortificado con baterías y puentes levadizos. Su estructura perdió completamente la función de residencia real.
Atravesando la torre de Normandía se accede al único camino interno que conduce a los restos de la iglesia de San Salvatore y al resto de dependencias, entre las que destacan la Sala de las Columnas, el Salón de Prisiones y la Sala Italia, la más grande de todas.
Desde las distintas terrazas hay una visión completa del golfo de Nápoles.
Fue aquí donde falleció Alfonso V el Magnánimo, el 27 de junio de 1458.
Virginio, el poderosos jefe de los Orsini, que se había aliado con los franceses durante la invasión de 1494, cuya familia había tratado de deponer a Alejandro VI, fue encarcelado en la fortaleza con el beneplácito del Papa y fallece envenenado el 8 de enero de 1497.


